martes, 21 de octubre de 2008

Obispos contra Educación para la Ciudadanía

Desde que bajo el gobierno de la UCD se aprobó la ley del divorcio en España, los ataques a la familia no han cesado, ni cesarán mientras sobreviva este régimen que padecemos. La última es la imposición en las escuelas de la asignatura Educación para la Ciudadanía. Más allá de una mera asignatura, hay que destacar que en los cursos necesarios para obtener el título del CAP (imprescindile para poder dar clases en cualquier colegio) se especifica que los contenidos de Educación para la Ciudadanía son "transversales", es decir, que han de impartirse, aún con calzador, en todas las asignaturas. Si es necesario, como se explicó en un seminario del dichoso CAP el año pasado, con ejemplos. Así -repetimos, el ejemplo es real- "en matemáticas en vez de sumar peras o manzanas se pueden poner ejemplos sumando ciudadanos" (sic).

En todas las comunidades autónomas está apareciendo parte del contenido que se quiere imponer a los alumnos, algunos total y absolutamente aberrantes en los que se invita a los niños a "experimentar sexualmente". Este diabólico plan que quiere dar la estocada final a la familia, robándoles a los padres la formación moral de sus hijos, cuenta con una gran ventaja: el amodorramiento generalizado de la sociedad española. La Jerarquía ha levantado la voz, si bien con escasos resultados. Al fin y al cabo, tal asignatura es coherente con la dinámica propia del actual régimen ensalzado por los señores Obispos.

En todo caso, nos alegramos enormemente de protestas públicas como las mostradas a continuación:

Los obispos de Baleares y de la C. Valenciana alientan a los padres a exigir el respeto de sus derechos
Muestran también su preocupación por las iniciativas contrarias al derecho a la vida y por la discriminación que sufre la asignatura de Religión.
REDACCIÓN HO y AVAN.- Los ocho obispos de la provincia eclesiástica valentina, de la que forman parte las tres diócesis de la Comunitat Valenciana y las tres de las islas Baleares, expresaron ayer su preocupación por la situación de "muchos padres de familia" ante las asignaturas de Educación para la Ciudadanía, y por la "abundancia de libros de texto que no abordan de forma adecuada su contenido educativo".
Durante una reunión celebrada este lunes en Valencia, que se enmarca dentro de los encuentros periódicos que mantienen los prelados de la provincia eclesiástica para abordar temas que afectan a la pastoral de sus diócesis y su repercusión en la sociedad, los obispos analizaron la situación de la enseñanza y coincidieron en la necesidad de que los padres "se esfuercen por exigir sus derechos ante las distintas administraciones y el Estado".
Respecto a la asignatura de Religión, los obispos lamentaron la "injusta asignación de horarios" que otorgan numerosos centros docentes a estas clases, de libre elección por los alumnos y sus familias, y coincidieron en la necesidad de que se trate a la asignatura "con la misma dignidad que las demás materias educativas, tal y como reclaman padres, alumnos y profesores".
Los obispos analizaron también las últimas iniciativas contra el derecho a la vida en el territorio de la provincia eclesiástica valentina y mostraron su "preocupación", al tiempo que constataron la "importancia cada vez mayor" de que en las familias, parroquias y escuelas se " fomente desde edades muy tempranas, el respeto más absoluto a la vida humana desde su concepción hasta su fin natural".
Abordaron, así mismo, la situación actual de la pastoral de la salud y acordaron una mayor promoción en las parroquias de equipos de voluntariado en la atención a enfermos y en la colaboración con los capellanes de hospitales, para la atención a todos los enfermos que lo soliciten, de acuerdo con el derecho que les ampara.
En la reunión de ayer, presidida por el cardenal arzobispo de Valencia, Agustín García-Gasco, participaron los obispos de Orihuela-Alicante, monseñor Rafael Palmero; Segorbe-Castellón, monseñor Casimiro López; Mallorca, monseñor Jesús Murgui; Ibiza, monseñor Vicente Juan Segura y los obispos auxiliares de Valencia, monseñores Esteban Escudero, Enrique Benavent y Salvador Giménez, quien es igualmente, Administrador Apostólico de la diócesis de Menorca.

No hay comentarios: