jueves, 21 de abril de 2011

Solicita que no se sigan realizando abortos en el Hospital de Sant Pau, o que el Arzobispado de Barcelona salga de su Patronato


¡Qué errados andan algunos, que se empeñan en no llevar a Dios a la política y por el contrario, se llevan la política a la casa de Dios! Pues es por mantener cierta connivencia con el poder y con el Sistema político que padecemos, que nos encontramos en esta situación:

Se ha denunciado ya hasta la saciedad que algunos hospitales catalanes, en cuyas juntas de gobierno está representada la Iglesia Católica por medio de sus respectivos obispados (concretamente el de Sant Pau, el Hospital General de Granollers y el Hospital de Sant Celoni , así como el Hospital Materno-infantil de San Juan de Dios, perteneciente a la Orden Hospitalaria), se han convertido en centros donde se aborta y por tanto, en una gangrenosa fuente de escándalos y podredumbre moral para toda Iglesia.

Desgraciadamente, estamos hablando de un mal demasiado extendido como para que nuestra pequeña asociación pueda combatirlo en todos sus frentes. Por ello hemos decidido centrarnos (de momento) en el Hospital de la Santa Creu y de Sant Pau, de la diócesis de Barcelona, donde según la Generalitat se practican abortos quirúrgicos, al menos desde el año 2005.

En el Hospital de Sant Pau nos encontramos, además, con profesionales que desprecian públicamente la ética cristiana. Este es el caso del abortista Doctor CALAF, Jefe de Ginecología del Hospital de Sant Pau, cargo desde donde puede “forzar” a que en este hospital se practiquen abortos quirúrgicos, se administren píldoras abortivas, técnicas de reproducción asistida, abortos químicos, vasectomías... que con motivo de la puesta en marcha de la nueva ley del aborto declaró en una rueda de prensa junto a la abortista Marina Geli:
… “Antes de las seis semanas de gestación, el pequeño tamaño del embrión no permite la interrupción quirúrgica del embarazo. En estos casos se opta por la interrupción farmacológica (concretamente la píldora RU-486, que provoca “aborto químico”). El doctor Calaf destacó que "cuanto antes se realiza la interrupción voluntaria del embarazo, mejor, tanto por razones médicas como psicológicas". Además, añade, "los riesgos o efectos indeseables son muy pocos" (salvo la muerte del nonato, claro)…

¿Cómo actúa y qué es la píldora RU-486?: Asegura el ginecólogo Joaquim Calaf: “El tratamiento consta de dos pastillas, la primera (la RU-486) provoca el desprendimiento del embrión desde la pared y la segunda, tomada unas 36 horas después, contrae la pared del endometrio y facilita la expulsión de la “materia” desprendida por el primer fármaco (es decir, del hijo) con poco dolor, si se hace antes de los primeros 69 días de la gestación… Creo que en Catalunya se debería optar por el aborto farmacológico, un recurso incruento (para la mamá, claro), que las mujeres podrían aplicar en su casa, de forma privada»…

¿Esta es la ética que debe de promover el Jefe de Ginecología de un hospital, cuyo patronato está participado en un 33% por el arzobispado de Barcelona? ¿Alguien que además es el Presidente de la Comisión de Técnicas de Reproducción Asistida de la Generalitat? ¿Es que no hay en Cataluña estupendos ginecólogos, de intachable conducta cristiana?

Y no somos los primeros en decirlo: Anteriormente ya se han producido múltiples denuncias, de entre las que destacamos las del presidente de la Federación Internacional de Asociaciones de Médicos Católicos, Josep Maria Simón, que valientemente denunció “la falta de contundencia de los representantes de la “Esglesia catalana” por no oponerse pública y contundentemente a estas prácticas «que atentan contra la vida y contra la esencia de la doctrina católica» y que «abortar una vida está mal, sea cual sea la circunstancia en la que se hace, y eso deberían dejarlo claro públicamente los representantes de la Iglesia en el Hospital de Sant Pau… la Iglesia debería ser más beligerante, o de lo contrario, abandonar el patronato del hospital».

¿Pero qué dicen los responsables, algunos líderes y la jerarquía de la Iglesia en Cataluña?:

En referencia a estos escándalos, la gerencia del Hospital “católico” de Sant Pau, se limitó a afirmar: «Estamos cumpliendo lo que establece la ley (actual) y “sólo” practicamos abortos en los supuestos que señala el texto legal, que en 2009, fueron “unos veinte”». Por su parte, la diócesis de Barcelona, así engañada por las autoridades del Hospital de Sant Pau, emitió el siguiente comunicado: http://www.cruzdesanandres.org/docs/yI4QfComunicado%20del%20arzobispado%20de%20Barcelona.doc aunque el Ministerio de Sanidad documenta lo contrario: http://www.cruzdesanandres.org/docs/R2bzMinisterio%20de%20Sanidad%20IVE%202008-3.pdf

Y no son hechos absolutamente desconocidos por la jerarquía, pues en la XXII Jornada Catalana de Pastoral de la Salud celebrada el 23 de octubre de 2010 en la diócesis de Terrassa, el jefe de ginecología del Hospital de San Juan de Dios, Josep Mª Lailla Vicens afirmó en su ponencia no compartir la moral católica y además, mostró favorable al aborto provocado hasta las catorce semanas de gestación. Todo ello en presencia del obispo auxiliar de Terrassa, Salvador Cristau Coll, del obispo de Vic Romà Casanonova y de Raúl Berzosa, antiguo obispo auxiliar de Oviedo… que desgraciadamente no nos consta que replicaran (ni pública ni privadamente) al Sr. Lailla.

Afortunadamente y además de Cruz de San Andrés, otras organizaciones sí están criticando esta escandalosa situación (aunque curiosamente no son catalanas, ni específicamente católicas), como es el caso de Hazteoir, que ha denunciado repetidamente esta situación y de otros líderes provida, tales como Benigno Blanco, presidente del Foro Español de la Familia, que declaró que es «escandaloso que en un hospital en el que la Iglesia esté implicada directa o indirectamente se practique un solo aborto»… «Resulta incongruente, con la posición absolutamente modélica que mantiene la Iglesia en su defensa de la vida», por lo que debe de «rectificar y solucionar urgentemente esta situación».

Y precisamente eso es lo que consideramos en Cruz de San Andrés, como miembros de la Iglesia Católica y como barceloneses: Que esta situación ha de solucionarse urgentemente, para lo cual te pedimos, querido amigo, que firmes la carta que encontrarás en este enlace: http://www.cruzdesanandres.org/firmar.php?idnoticia=62 que será remitida a Su Eminencia el Cardenal Martinez Sistach.

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